Este ciclo está dedicado a aquellos géneros cinematográficos que por lo general no se ven reflejados en los ciclos de cine-debate o cine arte, como por ejemplo, el cine clásico, el cine bizarro, la ciencia ficción, el cine negro, el erótico, el de terror, el spaghetti western, el blaxploitation, el anime, el cine clase 'b' en general y otros géneros. Dentro de estos subgéneros cinematográficos pueden encontrarse verdaderas joyas cinematográficas, como así también las peores películas de la historia; pero si hay algo que todas tienen en común es su garantía de diversión. Esperamos que lo disfruten.

Los Cínecos



PROGRAMACIÓN AÑO 2014

Audaz Golpe de los Desconocidos de Siempre

Jueves 1 de septiembre

Título original: "Audace Colpo dei Soliti Ignoti" (1960)

Dirección: Nanni Loy
Intérpretes: Vittorio Gassman, Renato Salvatori, Claudia Cardinale, Nino Manfredi, Carlo Pisacane, Tiberio Murgia, Vicky Ludovici y otros.
Guión: Agenore Incrocci (Age) y Furio Scarpelli; Nanni Loy en diálogos.
Fotografía: Roberto Gerardi
Música: Piero Umiliani - Chet Baker
Producción: Franco Cristaldi
País: Italia
Duración: 113 min.

Peppe el Pantera (Vittorio Gassman en un inolvidable papel) acude con su banda de ladrones a la llamada de un amigo, Virgilio "el milanés" (Riccardo Garrone). En Milán tienen la oportunidad de dar un golpe maestro, consistente en atracar un camión que transporta el dinero de la recaudación del "Totocalcio" (el Prode italiano). Pero como es de esperarse, pronto las cosas se complican.

Nanni Loy sustituye como director a Mario Monicelli en esta secuela del antológico film "Los Desconocidos de Siempre", una de sus mejores comedias. Vittorio Gassman y Claudia Cardinale retoman sus divertidos personajes junto a un inolvidable Carlo Pisacane en su papel de Capanelle, Tiberio Murgia y Gastone Moschin, esta vez sin Marcello Mastroianni pero con la presencia de Nino Manfredi y Vicky Ludovici.

El film, al igual que su predecesor, resulta ser una parodia de las películas al estilo de Rififí, con una organización científica de grandes golpes criminales pero en un clima de improvisación a la italiana que le otorga un tono irresistibilmente comico y ridículo. La estupenda banda sonora original de Piero Umiliani con solos de trompeta de Chet Baker contribuye a evocar irónicamente el género policial antes mencionado.

Resaltando aún más la veta cómica de su antecesora, esta secuela es fundamental para todos aquellos que aprecien o gusten de la época de oro de la comedia italiana y de visión obligatoria para los que vieron la primera.


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Hablemos de Mujeres

Jueves 8 de septiembre

Título original: "Se Permettete Parliamo di Donne" (1964)

Dirección: Ettore Scola
Intérpretes: Vittorio Gassman, Walter Chiari, Riccardo Garrone, Marco Tulli, Eleonora Rossi Drago, Maria Fiore, Attilio Dottessio, Rosanna Gherardi, Mario Lucidi, Donatella Mauro, Ivy Olsen, Olga Romanelli, Heidi Stroh.
Guión: Ettore Scola, Ruggero Maccari
Fotografía: Alessandro D'Eva (B y N)
Música: Armando Trovaioli
Producción: Concordia Compagnia Cinematografica / Fair Film
País: Italia
Duración: 108 min.

Primer largometraje de Ettore Scola, conformado por nueve segmentos independientes protagonizados maravillosamente por Vittorio Gassman, que hablan sobre el amor, el romance, y en definitiva, las mujeres. Con un tono satírico y melancólico al mismo tiempo, Scola consigue retratar con extraordinaria maestría la sociedad italiana en el período del boom económico.

Ettore Scola, como buen italiano, no ahonda en el porqué sino en el cómo se comportan las féminas a lo largo de nueve sketches -o nueve maneras diferentes de reírse de las relaciones entre hombres y mujeres. Pero no sólo retrata a las mujeres, sino también al carácter del hombre italiano (o latino en general): embaucador, vividor, machista, pollerudo y con una irresistible pasión por seducir a todo lo que tenga dos piernas y escote.

El camaleónico Vittorio Gassman interpreta diferentes papeles en cada uno de los episodios, desde un bromista empedernido hasta un prisionero y desde un campesino bruto hasta un niño de mamá, siempre rodeado de bellas mujeres italianas. Así, a lo largo del film desfilan por la pantalla toda una fauna masculina de farsantes, libidinosos, sometidos, perdedores, perezosos, jetones, cornudos, cartoneros, playboys y unos cuantos chantas.

Un verdadero tour de force interpretativo que sólo puede ser llevado adelante por un actor brillante, dúctil y único como el grande Vittorio.


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Los Monstruos

Martes 13 de septiembre

Título original: "I Mostri" (1960)

Dirección: Dino Risi
Intérpretes: Vittorio Gassman, Ugo Tognazzi, Michèle Mercier, Marisa Merlini, Lando Buzzanca y otros.
Guión: Agenore Incrocci, Furio Scarpelli, Elio Petri, Dino Risi, Ettore Scola, Ruggero Maccari.
Fotografía: Alfio Contini (B y N)
Música: Armando Trovajoli
Producción: Mario Cecchi Gori
País: Italia - Francia
Duración: 115 min.

A principios de los años sesenta, en Italia comienzan a proliferar las películas de episodios. Con un tratamiento de comedia, estas cintas por lo general rondaban sobre un tema común o en torno a la personalidad de un actor cómico, y agrupaban unos cuantos episodios de variadas duraciones. Con esto se intentaba retratar desde distintos prismas a la sociedad italiana, realizando una sátira de sus costumbres, y al mismo tiempo un especie de crítica social. Una de las películas mas famosas de este tipo es “I Mostri”, la cual fue dirigida por Dino Risi, y cuyo guión es obra de Age-Scarpelli, Ugo Petri, Ettore Scola y el mismo Risi. En ella, el director realiza un dibujo ácido de la sociedad italiana, a través de unos personajes que salen de lo normal.

Durante 118 minutos, Risi recorre en veinte episodios "la manera pérfida y sutil en la que el progreso inscribe las viejas lacras humanas: la hipocresía, el desprecio, la mentira, el egoísmo, la manipulación, el abuso, etc.". La duración y las estructuras de cada uno de los episodios son bastante diferentes, pero todos están relacionados de manera uniforme con la Roma de principios de los sesenta. Además, todos los episodios giran alrededor de una figura central, usualmente caricaturesca, interpretada por los dos actores principales, los cuales aparecen de manera alternada en cada uno de los segmentos. Mientras que algunos episodios son muy cortos y presentan una estructura similiar a la de un sketch, otros poseen una construcción más elaborada de la historia, aunque no por eso son necesariamente mejores o más representativos de una sociedad que a los ojos del director se encuentra completamente torcida.

Dino Risi dibuja al monstruo social que habita en la Roma de los sesenta, enfatizando el carácter patológico de este nuevo ciudadano, con todos sus rasgos característicos, donde el bien propio está por sobre el bien común, y donde los defectos físicos aparecen como un forma de discriminación. Cada uno de los episodios representa una mirada cínica y contradictoria de este país que experimenta un periodo de rápida transformación, donde tanto al interior de la familia, en la política, en la educación y la religión, comienza a gestarse un cambio importante en los valores y los códigos impuestos años atrás.

Mediante una excelente dirección, estupendas actuaciones, un inteligente guión y una más que adecuada banda sonora, obra de Armando Trovajoli, Dino Risi logra convocar con éxito a los rostros de la miseria entre la risa y el espanto.

(Extraído -sin spoilers- de CinemaScope: una mirada al 7mo arte http://fantomas-cinemascope.blogspot.com/2009/06/i-mostri-acida-critica-una-sociedad.html)


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En Nombre del Pueblo Italiano

Jueves 22 de septiembre

Título original: "In Nome del Popolo Italiano" (1971)

Dirección: Dino Risi
Intérpretes: Vittorio Gassman, Ugo Tognazzi, Ely Galleani, Yvonne Furneaux, Michele Cimarosa, Renato Baldini, Pietro Tordi, Maria Teresa Albani, Enrico Ameri.
Guión: Agenore Incrocci y Furio Scarpelli
Fotografía: Alessandro D'Eva
Música: Carlo Rustichelli
Producción: International Apollo Films
País: Italia
Duración: 103 min.

Mariano Bonifazi (Ugo Tognazzi) es un honrado pero inflexible juez de izquierdas italiano. Mientras lleva a cabo la investigación del asesinato de una joven, ocurrido en extrañas circunstancias, comienza a sospechar que un famoso empresario llamado Lorenzo Santenocito (Vittorio Gassman) está vinculado al crimen. Lorenzo, desprejuiciado, multimillonario y prevaricador, es un vividor con pasado fascista. El funcionario cree firmemente que ha mantenido relaciones con la muerta, así que dirige su investigación a destruir la coartada que el industrial se ha armado. (FILMAFFINITY)

Por momentos tragicómica, por momentos satírica y corrosiva, va mucho más allá de la simple historia detectivesca. Una vez más los geniales guionistas Age y Scarpelli (autores de "I Soliti Ignoti", "La Grande Guerra", "Tutti a Casa", "Mafioso", "I Mostri", "L'armata Brancaleone", "The Good, the Bad and the Ugly" y "C'eravamo tanto amati", por mencionar sólo algunos) abordan cáusticamente temas de gran densidad sin hacer pesada la trama ni caer en el panfleto, sino enriqueciéndola y dándole sustento a todo el relato.

En esta historia se enfrentan dos enormes personajes -interpretados extraordinariamente por dos enormes actores en un tour de force inolvidable- con valores e ideologías opuestos, -el tenaz magistrado "difensore di leggi che proteggono una società che fa schifo" y el engreído industrial sospechoso de asesinato-, Dino Risi realiza uno de los mejores films de denuncia político-social, atacando sin piedad a la sociedad entera, con su sistema judicial, su burocracia, su corrupción, el mundillo de los grandes negocios (la empresa química que contamina el entorno, la constructora que avanza fuera del marco de la legalidad, etc.), la enorme hipocresía de todos (desde el mismo industrial hasta los padres de la víctima pasando por todos los que están en medio) y la decadencia cultural del pueblo italiano -cuyo arquetipo y emergente natural reconoce el magistrado en la figura de Santenocito, al cual debe juzgar "en nombre del pueblo italiano".

Acompaña una impecable banda de sonido a cargo del prolífico compositor italiano Carlo Rusticchelli (autor también de numerosas bandas sonoras, tales como "L'armata Brancaleone", "Brancaleone Alle Crociate ", "Divorzio All'italiana", "Made in Italy" y "Detenuto in Attesa di Giudizio").

Una obra maestra casi olvidada de Dino Risi, con un final de notorio simbolismo, fellinesco, singular y lapidario a la vez, donde no se salva nadie e invita al espectador a pensar por sí mismo sobre el rol de la justicia y la sociedad italiana, aunque se puede aplicar sin problema a cualquier otra sociedad con características similares (como por ejemplo la Argentina).



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El Desierto de los Tártaros

Martes 27 de septiembre

Título original: "Il Deserto dei Tartari" (1976)

Dirección: Valerio Zurlini
Intérpretes: Vittorio Gassman, Jacques Perrin, Giuliano Gemma, Helmut Griem, Philippe Noiret, Jean-Louis Trintignant, Max von Sydow, Fernando Rey, Francisco Rabal, Laurent Terzieff
Guión: André G. Brunelin, Jean-Louis Bertucelli (Novela: Dino Buzzati)
Fotografía: Luciano Tovoli
Música: Ennio Morricone
Producción: Coproducción Italia-Francia; Cinema Due / France 3 Cinéma
País: Alemania Occidental, Francia, Italia
Duración: 140 min.


Miembros de un ejército de difícil filiación esperan a lo largo de los años un ataque de los tártaros. Están tácitamente encerrados en la fortaleza de Bastiano, una construcción rodeada por los restos de una ciudad destruída y calcárea que limita con el desierto; "con la nada", como precisa uno de los personajes, pero que está estratégicamente situada para defender el paso de un inmenso y legendario desierto. Habitan un espacio casi mítico, alejado de la historia, del tiempo y del espacio, esperando que algo suceda entre la rigidez de las normas militares y la soledad absoluta y repetitiva de un lugar que está casi fuera del mundo. La vida de la guarnición se desarrolla en medio de patrullas, sesiones y discusiones sobre tácticas de batalla, mientras esperan que el ataque de un enemigo que nunca llega pueda justificar su presencia allí.

La historia se centra en el joven Giovanni Drogo, quien poco después de su ingreso en la fortaleza pretende abandonarla, intentando conseguir un certificado médico que lo releve, pero luego decide quedarse esperando el momento de que le lleguen las glorias militares, la lucha, la guerra...

Las grandiosas tomas del inmenso desierto, las montañas y la extraña ciudad abandonada, que parece contener algún misterio de tiempos pasados, todo contrasta terriblemente con el destino de los hombres: sólo basta con ver sus ridículas ceremonias, su férrea disciplina militar, su absurda e irrisoria carrera en medio del olvido, mientras lo sacrifican todo -salud, juventud, familia, amigos- por un ideal militar: liderar la defensa contra el ataque de un enemigo al que nadie jamás ha visto.

Los personajes están repletos de emociones reprimidas y confusión interior; el fuerte es una metáfora de su prisión espiritual y el enorme desierto es un recuerdo de sus miedos y aspiraciones perdidas a través de años y años de rutinas repetitivas que terminan convirtiéndose en sus vidas, mientras esperan que algo extraordinario les dé algún sentido a sus existencias.

La arena del desierto, la artificialidad de la vida militar dentro de la fortaleza, los rituales y los uniformes, los miedos inconfesados, las amistades y enemistades entre los oficiales, la autoridad que casi nunca explica sus decisiones, los recuerdos a medias de sus vidas pasadas, y el presentimiento siempre presente creado por las sombras del desierto, sombras que a veces generan visiones de una amenaza indefinible; una amenaza aplazada e inconcreta, pero obsesivamente presente.

Valerio Zurlini y su productor-protagonista Jacques Perrin fueron fieles a la novela, llevando a la pantalla una de las obras maestras de la literatura más abstractas, metafóricas y depresivas del siglo XX (además de ser una de las pocas novelas admiradas por Jorge Luis Borges). Con un reparto excepcional, Perrin está perfecto y convincente en su papel de Drogo, el joven oficial que espera y espera por algo que no sucede: el ataque de los tártaros simboliza todo aquello que anhela pero que tal vez cuando llegue sea demasiado tarde. Valiente, orgulloso y con grandes expectativas, el héroe se va volviendo cada vez más débil y fracasado bajo el peso implacable de los años.

Acompaña un reparto excepcional: Vittorio Gassman como el coronel Filimore, un hombre experimentado e inteligente que contrasta con el Mayor Mattis (Giuliano Gemma), un fanático de las reglas y el orden; Max Von Sydow en una de las actuaciones más brillantes de la película interpretando a Hortiz, un oficial veterano que espera de que llegue el ataque tártaro les cambie la vida; junto a Jean-Louis Trintignant, Francisco Rabal, Fernando Rey, Philippe Noiret y Helmut Griem.

La impresionante fotografía es realzada por la música de Ennio Morricone, ambas ayudan a retratar el paisaje onírico, inexorable y sobrecogedor que envuelve a este inolvidable y único film.


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